martes, 21 de marzo de 2006

PC Portátiles con Súper Baterías

Según un entretenido artículo aparecido en BBCMundo.com , nos adelanta que pronto nuestras computadoras portátiles podrían funcionar todo el día sin necesidad de recargarla, gracias a la inminente llegada de las baterías de combustible comerciales. En la feria tecnológica de Cebit, en Hanover, Alemania, la empresa taiwanesa Antig anunció que tiene previsto la comercialización de sus baterías de combustible a principios de 2007.

Las primeras versiones de unidades que utilizan metanol podrían mantener a una computadora funcionando durante cerca de nueve horas. La tecnología de las baterías de combustible recibió una inyección de optimismo recientemente, cuando los reguladores de los vuelos internacionales cambiaron las reglas que prohibían a los pasajeros transportar metanol inflamable.

La empresa Antig, dijo que las primeras baterías de combustible que se pondrán a la venta se basarán en las tradicionales de litio-ión, pero con metanol. En lugar de almacenar energía, las baterías de combustible generan electricidad mediante la separación del metanol a través de un proceso electroquímico.

Para recargarlas, basta con rellenarlas de combustible de un cartucho. Estos dispositivos "híbridos" funcionarán con las computadoras portátiles actuales, a través de sus entradas de medios, típicamente donde se encuentran los lectores de CD/DVD.

Una empresa asociada de Antig que se dedica a la fabricación ya está evaluando el producto terminado, un proceso que puede tardar unos seis meses. Las regulaciones vienen en camino, el producto viene en camino y la tercera parte, la infraestructura para los cartuchos, también viene en camino

Un avance más para no tener excusas de estar conectados con el mundo, en todo momento y en cualquier sitio.

jueves, 9 de marzo de 2006

El Desafío del Empleo Juvenil

Ser joven en Chile no es cosa fácil. Inmersos en una sociedad que gusta de los estereotipos los jóvenes son asumidos por la opinión pública como “irresponsables”, “indiferentes” y “flojos”, características que a la hora de enfrentar el competitivo mundo laboral se confabulan contra ellos para cerrarles las puertas del trabajo.


Para cada joven la inserción laboral es todo un desafío; una cruzada quijotesca cuando sólo se tienen 18 ó 24 años y se solicita una entrevista de trabajo. No sólo se deben franquear estos prejuicios, que distan mucho de la percepción que tienen de sí mismos, sino atravesar la gran barrera... esa pregunta que castiga el ímpetu juvenil... ¿Cuál es su experiencia laboral?.

Según estudios realizados por el Injuv, el 76% de los jóvenes de la Región de Tarapacá se sienten discriminados por su falta de experiencia laboral a la hora de solicitar un trabajo. Sin embargo, esta “falencia” en manos de un buen empleador puede ser revertida por las numerosas capacidades y aptitudes que le son inherentes a todo joven.

La juventud no sólo está capacitada para entender el agitado ritmo de la evolución tecnológica, sino que posee la predisposición al cambio y el potencial para incorporarlo en su cotidianeidad, así como también es muy capaz de asumir los nuevos desafíos que les impone el convulsionado mundo en que interactúan. Para la juventud es muy importante sentirse acogidos y valorados por sus pares y jefes; con pequeños gestos un trabajador joven dará el 100% de sus capacidades en su trabajo Existen muchas experiencias exitosas que demuestran que cuando se apuesta por los jóvenes los resultados son muy positivos. Es más, cuando han sido capacitados y potenciada la autogestión despliegan no sólo su eficiencia, sino cualidades tales como la solidaridad social y el compañerismo.

Los estudios del Injuv indican que las razones que motivan a las y los jóvenes a trabajar, apuntaban a que lo hacen para ayudar o mantener a su propia familia y a sus padres, y obtener dinero para sus propios gastos. Las por las que no buscan trabajo son desconocidas (32,5%), frente al 16,8% que declara no haber encontrado; el 13,3% que no tiene interés por ahora; el 13,1% no tiene necesidad de hacerlo y el 9% que señala no tener con quien dejar a sus hijos. Mientras tanto, la mayoría cree que a los jóvenes se les paga poco en los trabajos y que el mercado laboral confía más en gente experimentada que en los mismos jóvenes. Sin embargo, asumen con un importante optimismo las preguntas sobre “la percepción del mercado laboral”. El 84% se siente optimista y el 77% preparado.

Sin embargo lo anterior, prevalece más la distancia que el encuentro en el vínculo entre la juventud y el empleo. Este segmento es el más afectado con la desocupación, especialmente cuando muchos ni siquiera han terminado sus estudios o provienen de hogares con bajos ingresos. La tendencia en los últimos dos años indica que el desempleo entre los jóvenes de 15 a 24 años alcanza un promedio de 22%, doblando el promedio de la tasa nacional. Mientras que entre los 25 a 34 años la desocupación promedia el 12%.

Según el Ministerio del Trabajo, el 86% de los jóvenes de entre 15 y 19 años y que se encuentran ocupados o buscando trabajo, no estudia. Además, un poco más de la mitad de ese grupo no ha completado la Educación Media. El no contar con estudios, condiciona una buena inserción laboral. Es ahí la importancia de los 12 años de escolaridad obligatoria impulsada por el Presidente Ricardo Lagos, que busca enlazar el nivel educacional y la mejor calidad del empleo, sustentado además en que la Encuesta Casen ratifica este hecho, confirmando que a medida que aumentan los niveles de estudios, las personas incrementan sus posibilidades de ingresar al mercado laboral

Para generar mejores condiciones de empleo juvenil, se debe incentivar el trabajo independiente, la autogestión y el emprendimiento. Es así como es preciso abordar la incorporación de más jóvenes en el mercado laboral, flexibilizando las relaciones laborales, lo que permitiría compatibilizar el trabajo con los estudios. A pesar de que existe un proyecto de adaptabilidad laboral en la Cámara de Diputados desde hace ya varios meses, no existe consenso aún. Esta es una oportunidad del mundo político para con la juventud, en abrirles mejores condiciones para el ingreso al necesario pero esquivo mundo laboral.

miércoles, 1 de marzo de 2006

Discriminación: Tarea Pendiente para Chile…

Si miramos los países del mundo que han tenido alguna vez situaciones de convulsión social y crisis en sus formas de relacionarse y de mantener los consensos básicos que toda sociedad requiere para desarrollarse, la discriminación tiende a estar presente como una de las variables importantes que inciden en estas problemáticas.

En ese contexto, valoro el estudio denominado Tolerancia y No Discriminación", realizado por el Gobierno en el cual se logra constatar que los chilenos discriminamos a los pobres y a los jóvenes. Los pobres son percibidos negativamente, pues se valora a las personas principalmente por su condición socioeconómica. Esta es una discriminación menos visible que las tradicionalmente atacadas o citadas por los grupos de presión, sin embargo, los resultados requieren atención.

La valoración de las personas por su condición socioeconómica como forma de valoración de lo que es cada individuo en sí mismo es el hecho complejo de entender, el que está presente en lo cotidiano de nuestras vidas. Es inquietante, pues con la pregunta ¿dónde vives?, se responden al menos ocho temas que van definiendo el nivel de segregación que se sufrirá.

Además, más del 50% de los entrevistados cree que los pobres son pobres "porque no se esfuerzan lo suficiente". Y también sorprende que el 35% de los consultados afirme que "en Chile siempre van a existir diferencias de clase, así que es mejor acostumbrarse a cada uno en su nivel, sin buscar entremezclarse".Esta actitud se repite incluso a nivel de discriminación de los inmigrantes (la tendencia a segregar a los inmigrantes peruanos y bolivianos, y no a los europeos, ya que generalmente poseen mayores ingresos).

También la juventud es estigmatizada: 65% piensa que los jóvenes necesitan "mano dura" porque han perdido respeto a todo y, a su vez, los encuestados creen que el 60,3% de los chilenos "ve a los jóvenes ligados a la delincuencia y la drogadicción".El sondeo muestra, eso sí, avances en temas como la aceptación de homosexuales y de los enfermos de VIH-Sida.

La contraparte es la percepción de un alto nivel de discriminación -por diversos motivos- en los lugares de trabajo, que es señalado como el sitio más recurrente donde ocurre la segregación.

Esta investigación, un estudio de campo, fue encargada a la empresa IPSOS por el Ministerio Secretaría General de Gobierno en el mes de Diciembre de 2005, y constó de una encuesta telefónica de 607 personas en el Gran Santiago.